El crecimiento universitario en Ceuta, limitado por la falta de alojamiento

La expansión académica en Ceuta choca con la escasez de alojamiento asequible, un obstáculo clave para atraer a más estudiantes al campus

Campus Universitario
photo_camera Patio del Campus Universitario

La celebración del patrón Santo Tomás de Aquino en la Facultad de Educación, Economía y Tecnología de Ceuta no solo fue un momento para honrar la tradición académica, sino también para reflexionar sobre el futuro y los desafíos que enfrenta el campus universitario en su aspiración de crecimiento. Durante el acto académico, que tuvo lugar la semana pasada en el Salón de Actos del Campus Universitario, se puso de relieve la ambición de la institución de expandir su oferta educativa con tres nuevos másteres, según anunció el vicerrector para los Campus de Ceuta y Melilla, Salvador del Barrio García.

Sin embargo, este optimismo académico se ve ensombrecido por una problemática que afecta directamente a la capacidad de la universidad para atraer y retener a un mayor número de estudiantes: la escasez y el alto costo del alojamiento en Ceuta. La ciudad, con una superficie de apenas 20 kilómetros cuadrados, enfrenta una limitación significativa en términos de espacio disponible para nuevos desarrollos inmobiliarios, lo que repercute directamente en la oferta y el precio de los alquileres.

La situación del alojamiento en Ceuta es particularmente crítica para los estudiantes que desean estudiar en la ciudad pero no cuentan con los medios económicos para afrontar los elevados costos de vida. Un breve vistazo a las páginas de búsqueda de pisos revela que el precio de un apartamento de una habitación en el centro de la ciudad puede superar fácilmente los 700 euros mensuales, sin incluir gastos adicionales. Incluso en las afueras, los precios no bajan significativamente, rondando los 600 euros por un espacio similar.

Esta realidad plantea un desafío considerable para la universidad y la ciudad, que aspiran a convertirse en un polo de atracción para estudiantes de diversas partes. La falta de opciones de alojamiento asequible no solo limita el crecimiento estudiantil sino que también pone en riesgo la viabilidad de los nuevos programas académicos propuestos.

Ante este escenario, una de las soluciones podría ser la construcción de una residencia de estudiantes más grande o el desarrollo de pisos con precios adaptados a las necesidades económicas de los estudiantes. Esta medida no solo facilitaría el acceso a la educación superior en Ceuta sino que también contribuiría al dinamismo económico y cultural de la ciudad.

La problemática del alojamiento en Ceuta es un recordatorio de que el desarrollo académico va de la mano con la infraestructura y los servicios que pueden soportar dicho crecimiento. Para que la universidad y la ciudad prosperen como centro de educación y formación, es imperativo encontrar soluciones creativas y sostenibles que aborden la escasez de alojamiento asequible. Solo así Ceuta podrá superar uno de sus principales obstáculos y abrir sus puertas a una comunidad estudiantil más amplia y diversa.