“No es concebible que una tradición milenaria que ha marcado la identidad de nuestra tierra esté en peligro de extinción, sin que este Gobierno haya hecho nada más que incumplir sus promesas”, ha leído el vicepresidente primero de la Mesa de la Asamblea, Melchor León, para interpelar al Gobierno sobre la situación en la que está el proyecto que pretende convertir los puestos salazoneros de la explanada del Chorrillo en un ‘Mercado de Salazones’. Una nueva instalación que dignifique la labor de estos maestros artesanos, la dote de garantías sanitarias y a su vez sirva de reclamo turístico: un atractivo más que sumar al puzzle de oferta que ya ofrece Ceuta.
El proyecto, tal y como ha recordado León debería haber sido una realidad ya en 2023. “Una vez más nos encontramos con uno de esos anuncios y promesas de este Gobierno que o bien acaban en un cajón o terminan empantanadas retrasándose durante años”, ha censurado León. “Los salazones son ADN caballa y merecen todo nuestro apoyo para hacer viable su trabajo”, ha insistido León. Reclama el PSOE que se ejecute el proyecto de una vez y que siga siendo gratis para los artesanos y maestros del salazón. “Mucho nos tememos que tampoco será una realidad en este 2024”, ha lanzado León.
Y si lo que quería era apretar al Gobierno por mala gestión, la pelota se la ha devuelto Ramírez, señalando a Delegación del Gobierno (en manos del PSOE) y más concretamente al área de Costas, una diana o excusa, según se mire, habitual cada que vez que el PSOE o la oposición piden cuentas al Gobierno de Vivas (PP) sobre proyectos atrancados en terrenos cercanos al mar.
Sí. El proyecto está atrancado, ha reconocido el consejero de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos, Alejandro Ramírez. Pero no por culpa de su área, ni de la del Gobierno al que pertenece sino por las sucesivas y reiterados requerimientos de Costas para que el Ejecutivo proyecte la actuación conforme a lo que marca la Ley. Esto de la legalidad no lo ha especificado Ramírez, con lo que podría ser que estuviera deslizando que Costas actúa por capricho cuando hasta en 4 ocasiones ha pedido a Fomento que rehaga el proyecto.
Ramírez ha recordado que el Mercado de Salazones cuenta con 600.000 euros de financiación del Gobierno de la Nación, a través de fondos turísticos y que la Ciudad aporta más del doble al proyecto. Y que el proyecto perseguía esa actuación integral que creara un Mercado de Salazones atractivo turísticamente y con todas las garantías y la mayor dignidad para la labor de los maestros artesanos. Pero el terreno no es de la Ciudad, es de Costas.
Así la primera vez que se presentó el proyecto para requerir la autorización de Costas para la actuación en sus terrenos, desde Delegación requirieron cambios en el proyecto (1). “Se da una circunstancia extraña en este caso, que normalmente la autorización más costosa en este tipo de proyectos suele ser la de Carreteras, y en este caso esa nos llegó hace ya un año y medio”, ha ido desgranando Ramírez.
Se acometieron y se volvió a solicitar permiso para licitar la obra y comenzar los trabajos. Pero de nuevo Costas pide más cambios. En este caso, según la explicación de Ramírez, solicitan desde Delegación que entienden que para lo que se quiere hacer no alcanza con una autorización, sino que el Gobierno de la Ciudad debe pedir a Costas una concesión administrativa. (segundo cambio requerido). Fomento ejecuta los cambios en el expediente para adaptarse, pero…
“Hace tres meses nos comunica Delegación del Gobierno que se va a iniciar la actuación de Red Eléctrica (para el cable submarino que conectará Ceuta a la red eléctrica peninsular) que afecta a una zona importante de la explanada de Juan XXIII y nos requiere readaptar el proyecto por cuarta vez”, ha explicado Ramírez. En realidad es la tercera readaptación que hace Fomento, pero si se cuenta el proyecto original son 4.
Ante este nuevo obstáculo, Fomento se está coordinado ya con Red Eléctrica, la empresa pública se ha ofrecido incluso a acometer parte de los trabajos de adecentación de la parcela para el Mercado de Salazones. Todo va bien ahora.
“La Ciudad sigue haciendo actuaciones para que en verano los salazoneros tengan un sitio donde trabajar en buenas condiciones. Se ha adecentado el terreno, las propias casetas, se han hecho actuaciones en materia de suministro eléctrico, de saneamiento… No ha habido abandono, al revés, la Ciudad pone a su disposición todos sus recursos”, ha defendido Ramírez.
El consejero espera que la obra de Red Eléctrica que se prevé comience en breve no impida que este verano los salazoneros estén en peor situación. Pero tras explicar esto ha lanzado su ataque frontal contra el diputado socialista
“Si la titularidad fuera nuestra, el proyecto estaba ejecutado hace más de 2 años, se lo garantizo”, le ha espetado a León al que ha pedido que medie con Delegación para desbloquear la situación.
Y ese envite, lo ha visto León, con buen carácter recordando obras atrapadas en el tiempo en parcelas propiedad de la Ciudad. Como si fuera el 1, 2, 3. León ha citado la pista polideportiva de Juan XXIII, quizás por cercanía a la explanada de salazones, la conexión entre Manzanera y el Mixto o los Planes de Barriadas. Tras esta interpelación ha llegado otra de VOX que preguntaba por la situación del fallido parque de Santa Catalina.
Ramírez se ha reafirmado en que si no fuera por Costas, el proyecto estaba ejecutado, por falta de complejidad en el mismo y por el tiempo dedicado por Fomento al mismo.
Y se ha permitido un consejo: “cuando vuelva a traer una interpelación relativos a un tema de estos cuando realmente el hándicap que tenemos depende de Delegación y el Área de Costas, se informe primero en Delegación para que le digan cómo está el asunto”
