El 27 de abril el carguero "Aman", con bandera de Bahréin, hace escala en Ceuta para abastecerse de combustible y poner rumbo a Argelia. Es ése el momento que aprovechan tres inmigrantes marroquíes, de los que suelen frecuentar el puerto, para colarse en su interior. Los polizones han permanecido escondidos en la bodega del carguero hasta que al tercer día de navegación, en las proximidades del puerto de Orán, han sido descubiertos. El barco puso rumbo entonces a Argel para cumplimentar las operaciones que tenía comprometidas. Allí las autoridades negaron al carguero la posibilidad de desembarcar a los polizones.
Una embarcación de la empresa Workboat Service Strait, filial de Amarres Ceuta S.L, ha sido la encargada de trasladar a los polizones a puerto. Los tres inmigrantes han llegado a la ciudad alrededor de las 20.00 horas. En estos momentos están a disposición de la Policía Nacional.
Más grave de lo que parece
La Organización Marítima Internacional (OMI) es la encargada de realizar el recuento de todos los polizones que encuentran en los diferentes barcos. La presencia de estas personas en los buques trae consecuencias más graves de lo que muchos piensan y es que el barco puede retrasarse en los puertos por la burocracia que supone repatriar a los polizones. Un procedimiento complejo y al mismo tiempo costoso. Esto demuestra el problema que supone el que estas personas accedan de manera ilegal a los barcos.
