Emoción y fervor para recibir a la Expiración

En silencio, túnicas moradas junto al Cristo y burdeos con la Virgen han marcado el paso de la Cofradía.

La Cofradía de la Expiración ha sido la tercera en salir a procesionar este Viernes Santo. Con un silencio que ponía los pelos de punta, el Cristo de la Expiración y María Santísima del Amor se han encontrado después de un año con los fieles que les esperaban a las puertas de la Iglesia de África.

A las nueve de la noche los pasos han entrado en Carrera Oficial, han recorrido Constitución, Revellín, Paseo Colón y se han adentrado en Jáudenes antes de acceder a la Catedral.

En silencio, túnicas moradas junto al Cristo y burdeos con la Virgen han marcado el paso de la Cofradía.