En un comunicado, la representación de los trabajadores asegura que se trata de unas instalaciones que supuestamente eran para tres meses, “aunque llevamos 5 años”, y que no reúnen las condiciones de salubridad y seguridad para los trabajadores
El desprendimiento de piedras de grandes dimensiones es de una habitualidad mayor de lo permitido. Las mismas terminan cayendo en el interior del taller de mecánica”, asegura el comité. “Estamos, día tras día inhalando polvo y los vehículos sufren daños”, se explica en la nota.
En invierno, prosigue, “tenemos unas condiciones meteorológicas terriblemente malas, a lo que hay sumarle la ubicación y la lejanía en la que nos encontramos”.
Ante la situación, el comité pide a la Administración y a la patronal que se pongan manos a la obra “y nos den una solución”. En el supuesto de que las soluciones no lleguen, el siguiente paso será presentar una denuncia a la Inspección de Trabajo.