Cuando parecía que llegaríamos a final de año flotando en una balsa de aceite a nivel político, las últimas semanas han servido para que toda la tranquilidad se haya esfumado para el Gobierno de la Ciudad con dos cuestiones sobre la mesa: la posibilidad de establecer un Gobierno de coalición con el PSOE y la aprobación de los Presupuestos. Nada hacía pensar que a estas alturas hubiera dudas sobre que el presupuesto elaborado por Hacienda fuera a salir adelante, pero el año deparaba una última sorpresa y, a día de hoy, nadie puede garantizar que la aprobación definitiva sea una realidad.
Eso sí, el Gobierno, o al menos su portavoz, confía en que logrará sacar adelante el documento porque hace apenas unas semanas que se pasaba el primer trámite, la aprobación inicial, y la misma significa de facto, según sus palabras, aprobar la mayor parte del presupuesto, dejando solo espacio a las alegaciones y pequeñas modificaciones que puedan establecerse antes de la definitiva. Una aprobación definitiva que se espera poder realizar a mediados de la próxima semana, los días 27 o 28, después de que la Comisión Informativa se celebre este mismo jueves.
Pero lo cierto es que muchas cosas han cambiado desde la aprobación inicial y, aunque el portavoz intente hacer ver que no es así, pueden ser claves para que salga adelante de forma definitiva el documento presupuestario. Así, la entrada en juego de la idea de establecer un Gobierno de coalición por parte del PSOE y la negativa de los Populares puede convertirse en clave y es que los socialistas ya han advertido que sin Gobierno podría no haber presupuestos.
Para el portavoz sería “muy complicado, por coherencia, que habiendo aprobado un presupuesto, con inversiones, con subvenciones, con ayudas... ahora sea rechazado por los grupos que lo apoyaron” y va más allá a la hora de señalar al PSOE y explicar que “me parece muy difícil de justificar que una vez aprobado, con las implicaciones que tiene, no cuente con el apoyo suficiente por el motivo que me traslada”. Un motivo que no es otro que la negativa del PP a aceptar un Gobierno de coalición con el PSOE, en la que este martes ha insistido “entendemos que no cabe un Gobierno de coalición”, ha explicado Ramírez, quien además ha recordado que “fueron ellos los que hablaron de apoyos puntuales” hace unos meses, el pasado verano, por lo que ahora no ven posible el cambio de posición.
Respecto a si todo este proceso hace que el Gobierno sea hoy más inestable que hace unas semanas y se le vaya a hacer larga la legislatura, el portavoz no tiene esa sensación. Es cierto que es un “gobierno en minoría pero estamos dotando de estabilidad a las Consejerías, estamos haciendo un trabajo diario y marcando grandes objetivos estratégicos, como la rebaja del IPSI o el debate del texto refundido del PGOU”, ha explicado.
Eso sí, la aprobación del Presupuesto es vital y así lo ha manifestado en varias ocasiones durante su intervención, no solo por las inversiones que supone sino porque del mismo, ha recordado, dependen muchas subvenciones y convenios de carácter social. Si no se aprueba, ha explicado, “se crea una situación muy difícil en ámbitos muy sensibles”.
