Desde el Instituto se explica que la apertura de expediente disciplinario por falta muy grave que atenta contra la convivencia en el centro “apareja, de inicio, una expulsión cautelar que garantice la correcta instrucción del expediente”, en el que, según la nota, se propondrá “sanción aplicable”, de acuerdo con los establecido en el Reglamento de Régimen Interno, y que sancionará la Comisión de Convivencia, órgano dependiente del Consejo Escolar.
La dirección y los profesores del centro condenan y manifiestas la más absoluta repulsa por los hechos sucedidos, los cuales consideran “intolerables dentro del ámbito educativo”, así como en cualquier otro de la sociedad.
En la nota también ponen de manifiesto su solidaridad y afecto por la alumna agredida y su familia, “que cuenta con todo nuestro apoyo”.
En la nota emitida por el centro se precisa que la jefatura de estudios siempre actúa de manera contundente ante este tipo de situaciones, y que los profesores de guarda en el patio de recreo ese día acudieron inmediatamente a separar a las alumnas, consiguiéndolo con grandes dificultades. Las escolares fueron conducidas hasta la jefatura de estudio para la aclaración de los hechos.
Desde el Instituto también se explica que los padres fueron informados de los hechos sucedidos al momento y que se requirió su presencia en el centro.
Desde el IES Siete Colinas se ha querido transmitir a toda la comunidad educativa del centro, y a la sociedad en general, el mensaje de tranquilidad necesario para poder afrontar y resolver esta situación “no deseada”, asegurando que el claustro de profesores “trabaja siempre por y para nuestros alumnos”
