Un inmigrante alcanza a nado la playa de Benítez

El joven subsahariano llegó en buen estado de salud y no tuvo que ser llevado al hospital

photo_camera La expedición del Goyu durante el viaje/ CEDIDA

Peña Barcelonista (2): Mohamed; Amin, Yassin, Bonalo, Bumedian;  Dris, Hilay, Sulaiman, Bilal; Ibrahim y Faisal. Hicham, Mohamed e Ilias entraron en el transcurso del partido.
Goyu Ryu (1): Iván; Anas, Omarito, Yiyo, Ayman; Juan, Ilias, Luis, Filali; Abde y Nayim. Saltaron al campo también Fahd, Harrus y Omar.
Goles: 0-1, 70 Abde, 1-1 m 82, Sulaiman y el 2-1, 91, Bilal.
Arbitró el colegiado melillense Nourdin Abderrahman Abderrahim.

El estado del terreno La Espiguera era una alfombra pero los doscientos espectadores y casi el noventa por ciento de los seguidores del conjunto azulgrana se emplearon a fondo en amedrentar al colegiado local y por extensión a los jugadores de la ciudad hermana en este caso Ceuta. Los ceutíes pese adelantarse en el marcador no pudieron con el árbitro ni con el sobresalto en los vestuarios donde llegaron a lanzar hasta petardos.
 Fuad Harrus en sus declaraciones se mostraba cariacontecido por el sufrimiento de sus jugadores. “En este tipo de encuentros los árbitros rematan hasta los córneres, hemos recibido improperios de todo tipo y en la bajada al túnel de vestuarios –ha explicado el entrenador- Pensábamos que la cosa se enfriaría pero al llegar al vestuario nos escupen, nos insultan y como las ventanas y acceso daban al graderío, lanzaron no un petardo sino una auténtica bomba”.
 Este suceso pilló desprevenido al jugador ceutí Basilio que en ese preciso instante se encontraba en el baño del vestuario. El futbolista quedó totalmente aturdido y no pudo disputar siquiera un minuto de la segunda parte.  Ante tal panorama, Fuad Harrus acudió al árbitro para explicarle lo sucedido y solicitó presencia policial, una presencia que se limitaba a una pareja de la Policía Local.
“Estamos hablando de chavales con 16 y 17 años sin experiencia y sin mundo y estas algaradas y escandaleras les quitan las ganas de practicar el fútbol –continúa Harrus-  Los chicos se han quedado sin cabalgata, han estado ya montados en el barco a las cuatro de la tarde, autocar hasta Benalmádena donde paramos para cenar, y en Málaga coger el barco de las once de la noche hasta Melilla, un viaje de ocho horas”.
 Fuad Harrus, tuvo palabras de agradecimiento para Gabi entrenador del equipo melillense de fútbol sala que estuvo acompañando al equipo y al cuerpo técnico del Goyu Ryu, así como al presidente del Peña Barcelonista.

 Fuad espera recuperar anímicamente a sus jugadores de cara al próximo partido y que no pierdan la ilusión por seguir jugando y disfrutando sobre un terreno de juego.