Medio centenar de residentes del CETI han puesto rumbo a la Península esta mañana. La mayoría son subsaharianos que llevaban pocos meses en las instalaciones.
Con esta salida, la ocupación del Centro de Estancia Temporal sigue a la baja. En estos momentos, el CETI está al 70% con alrededor de 300 migrantes acogidos cuando su capacidad máxima es de algo más de 500.
La mayoría de los residentes son subsaharianos de Guinea, Sudán o Costa de Marfil, también proceden de Yemen y Siria.
Atrás quedaron esos tiempos en los que el CETI estaba saturado con más de mil migrantes. Momentos en los que el Ejército tenía que montar campamentos anexos a las instalaciones para poder acoger a tantas personas.
Esta situación se dio por última vez en verano de 2018 cuando en menos de un mes se produjeron dos saltos masivos y violentos a la valla. El primero en julio en el que consiguieron entrar 600 migrantes y el segundo en agosto con el que accedieron 200.