El periodista Ignacio Cembrero se centra en un artículo publicado en El Confidencial en la situación actual de las trabajadoras transfronterizas y las trabas que les está poniendo Marruecos.
El periodista analiza en su artículo cómo antes de la pandemia más de 2.000 personas cruzaban la frontera a diario para trabajar en Ceuta legalmente, dados de alta en la Seguridad Social. Actualmente, esa cifra se ha reducido a la mitad. ¿Qué ha ocurrido? "Aquellos marroquíes que cuentan con un contrato de trabajo, deben solicitar un visado en el Consulado de España en Tetuán válido para entrar en Ceuta y darse allí de alta en la Seguridad Social. Desde hace ya un mes las autoridades fronterizas marroquíes rechazan ese documento. Imposible, por tanto, pasar a Ceuta para iniciar los trámites para empezar a trabajar y cobrar una nómina".
Cembrero ha analizado este asunto con el Colegio de Graduados Sociales de Ceuta que hace una semana se reunió con la delegada del gobierno, Cristina Pérez, para tratar este asunto. Pérez le aseguró que "se está trabajando activamente para encontrar una solución adecuada".
La decisión de Rabat, reflexiona Cembrero, sobre los visados es coherente con su política con relación a Ceuta y Melilla. No acepta, por ejemplo, las sentencias civiles de los tribunales de las dos ciudades ni las comisiones rogatorias de sus jueces por el mismo motivo, porque están "ocupadas".
Por otro lado, han iniciado una recogida de firmas en Change.org para regularizar la situación de muchos trabajadores que siguen en Ceuta desde que abrieron la frontera pero están de manera ilegal ya que si pasan a Marruecos no podrán volver a la ciudad y seguir trabajando.
España les solicita un permiso de residencia o de trabajo en vigor. Para poderlos tramitar, es fundamental que tengan un pasaporte en regla. Estos trabajadores no cumplen este requisito, pues el hecho de estar atrapados desde el cierre de la frontera en marzo de 2020 les ha impedido renovar su documentación, ya que en Ceuta no hay consulado marroquí para hacerlo.
Si regresan a Marruecos para hacer el trámite luego no podrán acceder a Ceuta por no tener permiso de trabajo o residencia en vigor. Por este motivo, los afectados piden alguna solución para regularizar su situación.
