El Gobierno de Marruecos confía en que la Unión Europea le brinde apoyo para frenar el incremento de los flujos migratorios procedentes de su territorio. Así lo hizo ver el pasado lunes la embajada del país vecino en España, Karima Benyaich, quien aseguró que Rabat espera el “apoyo de otros” en esta tarea.
Benyaich hizo estas declaraciones en el transcurso de una recepción celebrada con motivo del 19º aniversario de la entronización de Mohamed VI. Durante el acto, la embajadora no cesó de glosar la “ejemplar” cooperación que en materia migratoria mantienen España y Marruecos.
La posición pública de ambos gobiernos insiste unánimemente en esa colaboración en la lucha contra la migración irregular. Rabat ha tratado de despejar cualquier sospecha sobre los controles que ejerce en la puerta de Europa, suspicacias abiertas con el repunte de la llegada de pateras a las costas andaluzas y el masivo salto a la valla de Ceuta la pasada semana.