Los elevados índices de desempleo que registra la ciudad sólo podrán combatirse con medidas excepcionales que, hasta el momento, no se han adoptado. Ésta es la principal conclusión que extraen los responsables de los sindicatos Comisiones Obreras y UGT tras conocer los datos publicados por el Ministerio de Empleo correspondientes al paro registrado el pasado mes de junio.
Según las estadísticas facilitadas por Empleo, el número de personas registradas en las oficinas de desempleo asciende en Ceuta a 13.730, esto es, 1.017 más que hace justo un año. Además, las afiliaciones a la Seguridad Social también descendieron en 380 con respecto a mayo hasta situarse en las 20.299.
“Vivimos en una ciudad que se encuentra en la UCI y para la que no se presenta posibilidad de recuperación a corto plazo”, diagnostica el secretario de Organización de Comisiones Obreras, Ramón del Valle-Inclán. Las cifras del paro registrado son, a juicio del sindicalista, la constatación del fracaso de las políticas económicas del Partido Popular.
Del Valle-Inclán afea a los responsables del Gobierno local el modelo de política promovido durante los últimos años en la ciudad, basado en el desarrollo de planes de empleo que, según denuncia, son utilizados para enmascarar la pésima marcha del mercado de trabajo. A este propósito, el sindicalista critica que las autoridades municipales justifiquen en la finalización del último plan de empleo el incremento en el número de parados registrado en junio. “Se dice que la subida del paro es por culpa del final del plan de empleo, pero cuando el desempleo desciende no se dice que es también por la estacionalidad derivada de los planes de empleo que se ponen en marcha”, critica.
“Los planes de empleo destruyen empleo”
Los planes de empleo también están en el punto de mira del secretario general de UGT, Antonio Gil. El dirigente del sindicato considera que estas iniciativas que promueven la creación de puestos de trabajo estacionales no hacen sino destruir empleo. Según explica a modo de ejemplo, la administración local habría perdido hasta 300 empleados públicos que han sido sustituidos por personal procedente de los planes de empleo y los programas de colaboración social.
Gil sostiene que una política de empleo basada en planes de empleo que procuran una ocupación temporal no servirá para deslastrar la economía. El secretario general de UGT propugna promover cauces para facilitar la llegada a Ceuta de inversiones privadas que animen el mercado laboral. “El Gobierno local debería favorecer a las empresas, facilitando trámites y ofreciendo incentivos, pero nada de esto está sucediendo –se queja Gil- Lo que tenemos es el resultado de la caótica política del presidente Vivas”.
