UGT tiene la acérrima intención de “cortar” las oposiciones de Amgevicesa para estabilizar 84 plazas de auxiliar de control. Es el “fondo” de una guerra más compleja que la central acaba de desatar contra una empresa municipal sobre la que tiene el temor de que se convierta en un “monstruo que nos va a comer a todos, porque las consecuencias las van a pagar los ciudadanos de Ceuta”, ha expresado el secretario general del sindicato en la Ciudad, Antonio Ramírez.
La base legal del asunto se asienta en una impugnación de las bases de la convocatoria por considerar que algunos, o muchos, de sus puntos no se ajustan al real decreto al que hace referencia y rige en la administración pública. No obstante, el matiz que puede jugar a favor de la sociedad es la ausencia de legislación imputable hacia la misma. En opinión de Ramírez, “se debería aplicar el mismo derecho y, además, existe una jurisprudencia que lo avala al contemplar la empresa como parte del organigrama de la Administración local”. Sin embargo, como ha manifestado, la última palabra la tendrá la justicia. Para llegar a ello, el primer paso ha sido el de presentar una demanda de conflicto colectivo a resolver por conciliación en los próximos días.
Entre los puntos más conflictos que aparecen en las bases, el secretario general de UGT ha destacado que esas 84 plazas deberían estar creadas antes del 31 de diciembre de 2020, y no es así. Es decir, no existen y, por tanto, no se puede estabilizar el empleo. En este sentido, Ramírez también ha apuntado que desconocen cómo se están ocupando esos puestos de trabajo a día de hoy, “suponemos que con las últimas encomiendas de gestión, pero desconocemos cuáles por más que hemos preguntado”.
Otro de los requisitos, de los que más polémica ha generado entre la ciudadanía, y que consideran una vulneración de la legislación ha sido el anteponer la baremación de méritos al examen. “Porque su objetivo ha sido el que los ciudadanos no se presenten. Ya anunciaron a quienes no sumaran 20 puntos que no se presentasen”.
La constitución de estas 84 plazas engordaría la plantilla de Amgevicesa hasta los 500 trabajadores. Una situación “insostenibles”, en opinión de la central, “que desembocará en la disolución de la empresa porque se está redimensionando hacía unos niveles que la hacen inviable”.
Ha alertado que la corporación local se podría encontrar en próximas fechas con un ERE como ya ha ocurrido en otros ayuntamientos, “como el de Parla que acabó como el rosario de la Aurora, echando gente a tutiplén”.
Vaticinan un “desastre”, que Amgevicesa “pegue un reventón”, señalan constantemente al Gobierno por incurrir en una “irresponsabilidad” y que esta empresa, como otras, haya perdido su objeto de ser. “Se crea con el fin de cubrir servicios de aparcamiento y la ORA, y se ha convertido en una macroempresa que va a llegar a los 500 trabajadores y asusta, ya que pone en peligro grave a 2000 familias”, ha lamentado Ramírez.
