El 2022 es un año grande para el vidrio, ya que la ONU lo ha declarado Año Internacional del Vidrio, pero en Ceuta hay poco o nada que celebrar.
Mientras que la recogida selectiva de envases de vidrio creció, en el conjunto del estado, un 5%, situándose en niveles prepandemia, en Ceuta las cifras cayeron por debajo de los niveles de 2019, cuando en la ciudad había 33 contenedores menos que en 2021 y alejadas de las cifras de 2013.
Según los datos emitidos por Ecovidrio, durante el año 2021, en Ceuta se reciclaron poco más de 2 kilos de vidrio por habitante, el volumen más bajo de todo el territorio nacional. La comparativa con Melilla es muy significativa. Los melillenses llevaron al contenedor verde 6,6 kilos de vidrio por habitante a los cerca de 300 contenedores (295) que hay en la ciudad hermana, frente a los 120 que hay en Ceuta. La ratio de habitantes por contenedor es aún más desalentadora. En Melilla hay un contenedor verde por cada 292 habitantes, mientras que en Ceuta la cifra se eleva a 696 ceutíes por contenedor.
Para certificar que la política de reciclaje de vidrio en Ceuta no funciona, en la ciudad, entre 2013 y 2019, no se recicló un sólo kilo de vidrio, por la cantidad de impropios (restos que no eran de vidrio) depositados en los contenedores y en ese 2013 se reciclaron 177 toneladas para su reutilización como materia prima, 2 toneladas más que en 2021.
La comparación con los datos nacionales es muy negativa. De acuerdo a Ecovidrio, en 2021 "se superaron las 884.000 toneladas recuperadas, lo que equivale a casi 19 Kg por habitante o 64 envases por persona. Esto sitúa la recogida en niveles similares a los de 2019, antes de que se produjera la pandemia". La lista de capitales de provincia está liderada por San Sebastián (36,22 Kg / hab), Pamplona (27,33 Kg / hab), Bilbao (24,27 Kg / hab). Girona (22,96 kg / hab) y Vitoria (22,85 Kg / hab).
Los números no avalan a Ceuta para recibir proyectos de economía verde y lo que supone un problema de concienciación en todos los niveles (administración y ciudadanía) si se pretende que los fondos provenientes de proyectos empresariales relacionados con la economía verde lleguen a la ciudad.
