La Amargura viste de solemnidad y devoción el Miércoles Santo

Después de tres años en casa, dos por la pandemia y uno por la lluvia, la Amargura abría las puertas de su hermandad en Villajovita a las siete de la tarde para iniciar la salida procesional de sus titulares. Decenas de personas esperaban ansiosas y con nervios este momento. 

Nuestro Padre Jesús Caído y la Virgen Santísima de la Amargura de San Juan de Dios salían en parihuelas, sin estrenos ni restauraciones para transmitir los duros tiempos por los que hemos pasado. Una austeridad que hacía a las imágenes brillar más si cabe. 

La Virgen porta el bastón de mando de la ciudad entregado esta mañana por el jefe superior de Policía de Ceuta, y es que esta procesión cuenta con representación tanto de la Policía como de la Autoridad Portuaria, con los que esta cofradía se encuentra hermanada.

Acompañados por bandas de música de Jaén y Sevilla, el Cristo y la Virgen han comenzado su recorrido que les ha llevado por la Avenida España para adentrarse por los Jardines de la Argentina, uno de los momentos más emotivos en los que ha podido apreciarse la belleza de las tallas. 

A las nueve de la noche la procesión entraba en carrera oficial, una hora larga antes de hacer su estación en la Catedral.

La comitiva enfilaba el Puente del Cristo camino de vuelta a la casa de hermandad, donde se ha recogido a medianoche rodeada de decenas de fieles.