La Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT (FeSMC-UGT) ha cuestionado el nivel de exigencia de los requisitos establecidos para la adjudicación del servicio de vigilancia y controles de acceso en la frontera de El Tarajal. El procedimiento de adjudicación quedó desierto por segunda vez el pasado agosto. «Se debería redactar un nuevo pliego de condiciones con unas especificaciones menos gravosas para que alguna empresa pudiera considerar presentarse y no ocurra lo mismo con las dos licitaciones anteriores», demanda la organización sindical.
El sindicato considera que se plantean exigencias difíciles de satisfacer por las empresas, tales como las de contar con un seguro de responsabilidad civil de 75 millones de euros -«para un servicio cuyo importe no llega ni al millón»- o de disponer de experiencia de trabajo en una frontera internacional. «Requisito difícil de satisfacer pues tan solo es susceptible de cumplirlo una empresa en toda España, ya que las únicas fronteras internacionales en las que opera la seguridad privada son las de Ceuta y Melilla, quedando así excluidas el resto de empresas», protesta el sindicato en su nota.
Además, el sindicato estima que los 50 trabajadores a los que tendría que subrogar la adjudicataria no pueden ser mantenidos con el importe de la licitación, establecido en 951.237 euros anuales.
«Ninguna empresa puede postularse teniendo en cuenta los requisitos establecidos –sostiene la FeSMC- Nos preguntamos si se trata de una licitación hecha a medida para que solo una empresa pueda acceder a la oferta, pues con la serie de requisitos exigidos no existe competencia a la hora de efectuar ofertas, ya que ni una sola compañía podría reunir estas características».
