Ceuta recibió durante el primer semestre del año a 84 menores extranjeros no acompañados

La cifra es un 30% inferior a la de principios de 2023 y se sitúa ligeramente por encima del nivel máximo de ocupación (88) fijado por el Ministerio de Derechos Sociales
Un policía, junto a un grupo de menores marroquíes en el polígono de El Tarajal
photo_camera Un policía, junto a un grupo de menores marroquíes en el polígono de El Tarajal (ARCHIVO)

El Servicio de Protección a la Infancia de Ceuta registró durante la primera mitad de este año la entrada en el Centro de Realojo Temporal La Esperanza de 84 menores extranjeros no acompañados, los mismos que solo en agosto de 2022, y las instalaciones han comenzado julio con solo 90 niños migrantes solos atendidos directamente por la administración (48) o por la Fundación Samu (42).

La cifra es un 30% inferior a la de principios de 2023 y se sitúa ligeramente por encima del nivel máximo de ocupación (88) fijado por el Ministerio de Derechos Sociales para coyunturas ordinarias sin contar los menores tutelados que han sido condenados a medidas de internamiento o albergados en otros equipamientos con perfiles de mayor vulnerabilidad.

Según los datos a los que ha tenido acceso Europa Press, la mayoría de los jóvenes foráneos desamparados de los que se ha hecho cargo la administración local han asegurado tener 17 años (38) o 16 (29). Del resto, 12 han dicho tener 15 y solo cinco entre 11 y 14.

El 76% de los niños migrantes solos acogidos por la Ciudad Autónoma son de nacionalidad marroquí (64). El resto se reparten entre diferentes países del África subsahariana y el Magreb: República de Guinea (6), Sudán (5), Senegal (3), Mali (2) y Egipto, Chad, Argelia y Costa de Marfil (uno de cada Estado).

El número de menores extranjeros no acompañados acogidos en Ceuta se ha reducido un 70% con respecto a marzo de 2020, cuando se declaró la pandemia de la enfermedad del coronavirus, momento en el que se situaba en 590. Ello ha sido posible gracias tanto al cambio de modelo de gestión de la frontera del Tarajalcomo a los mecanismos de derivación solidaria entre autonomías implementados durante los últimos años.

El incremento de la presión migratoria infantojuvenil procedente del Reino alauita se empezó a notar en la localidad española norteafricana desde principios de 2018 y se disparó entre el 1 de agosto de 2019 y el 14 de marzo de 2020. Con la imposición de las limitaciones de movilidad y el cierre de la frontera el número de niños migrantes solos acogidos en Ceuta fue decreciendo hasta la crisis migratoria de mayo de 2021, cuando superó el millar.

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